Weeks.

[...] pero nada es lo que parece, estos han sido días para recapacitar, siempre demostrando lo contrario.
Días para observar, analizar y darme cuenta de cómo es que van funcionando las cosas a mi alrededor.
Yo nunca dejé de ser la de siempre. Jamás mentí, jamás fingí.
Simplemente mostré un lado de mí, un lado 'oculto'. Mostré el lado que jamás nadie vio.
Pero no fue porque sí, todo tiene un porqué.
Esta vez no me encargaré de dar detalles. No vale más la pena.
Todo fue por algo, algo que duró unas semanas, algo que no volverá.
Ésta soy yo, la de siempre.
Seria, engreída, caprichosa, loca, conservadora, tranquila, directa, orgullosa, bipolar y sarcástica.
Mi verdadero yo, la persona que soy y que seré hasta el último de mis días. No me interesa si le gusta al mundo o no, así soy yo. Olenka y punto.

Nada que haya ocurrido es tan fuerte para hacerme cambiar, nada tiene el poder suficiente de lastimarme al punto de quitarme las ganas de todo, absolutamente nada.
Me he mostrado inmadura, débil, voluble, influenciable y lo sé, pero eso se acabó.
De ahora en adelante seré yo misma, yo con mis metas y mis propósitos.
Olvidándome de lo que pudo afectarme alguna vez, de las cosas que se dieron y me hicieron dudar de ésta realidad, de una realidad que existe y de las situaciones que me obligaron a actuar así.

Fueron sólo días, días locos, sin barreras, sin prejuicios, sin nada.
Días que yo misma dejo atrapados en el pasado, días que jamás volverán.